En mundos como la Tierra:
Los Extranjeros no pueden ser
felices.
Hermanos y Hermanas, no os
desesperéis, no os lamentéis, más bien decid como los Cuerdos Humildes: “No
somos nada sin Ti Señor Nuestro”.
No sufráis si hasta de vuestras
casas humanas os expulsan; no os lamentéis si os hacen sufrir con la demoníaca
arrogancia de los demonios disfrazados de hombres.
No, Hermanas y Hermanos nuestros,
porque Su Justa Mano toma las vuestras para haceros caminar más veloces y hacia
arriba, hacia Su Luz Espiritual.
No podrán, estad seguros, quitaros
la Santa Paz Interior, porque os ha sido donada por Su Santa Voluntad y os hará
felices hasta en los momentos más duros.
¡Vosotros la habéis saboreado! ¡Sed
felices entonces!
Ellos no podrán gozar de la Paz
Interior que produce una Conciencia tranquila. No podrán gozar de ella, ni en
la vida, ni después de sus muertes.
En el día de la “despedida” todos
ellos lo sabrán y llamarán amargamente, pero vosotros, Hermanos y Hermanas,
vosotros, sed felices por siempre.
Amén.
En Justicia Santa, yo Delhoal, os lo
confirmo.
Paz.
Antonio Pastor L.
Madrid, H.C.S.C (Caf.) ..... horas del 15 enero 2015.
o en facebook en: